CDC Desde los mensajes políticos de Sócrates a los afanes estilísticos de David Beckham, la banda, cintillo o vincha a la cabeza es un accesorio con historia propia en el mundo del fútbol. Hay jugadores como Claudio Paul Caniggia cuya imagen no puede ser separada de la cinta y otros como el francés Allan Saint-Maximin que buscan borrar los límites que existen entre el deporte y la industria de la moda.
Cintillo Allan Saint-Maximin x Gucci
Hace un par de semanas, Saint-Maximin, delantero del OGC Nice de la Ligue 1 de Francia, entró a la cancha usando un cintillo blanco (o marfil, según la descripción oficial) con una franja horizontal en rojo y verde. Los sabuesos fashion pronto descubrieron de que se trataba de una banda elástica Gucci, pero con un parche que tapaba la marca.
Saint-Maximin no buscaba esconder el hecho de que fuera Gucci, sino que en muchas ligas no se permite a los jugadores mostrar marcas que no sean las de sus zapatos o el sponsor de su club.
En detalle, el cintillo Allan Saint-Maximin x Gucci es este y cuesta USD 270. Sí, una estafa de doscientos setenta dólares.

Como sea, Saint-Maximin está tan enamorado del accesorio que incluso pidió a los ingenieros de EA Sport, a través de su cuenta Twitter, que la incluyeran en la saga de videojuegos FIFA.
@EASPORTSFIFA could you put that headband on me in-game?
— Allan Saint-Maximin (@asaintmaximin) January 26, 2019
¯\_(ツ)_/¯
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